DIME QUE TE DUELE Y TE DIRÉ QUE AMAR
• Me duele la garganta: Mi garganta se cierra por el dolor y la tristeza, entonces cantaré con alegría, entonando notas que alegren mi corazón y devuelva vitalidad y energía a mis días • Me duele el pecho: El pecho a veces duele por desamor, por decepciones entonces me abrazo más fuerte y decido aceptarme y amarme cada vez más recordando que soy lo más importante y que estaré hasta el último instante de esta vida conmigo mismo. • Me duelen los oídos: Los oídos duelen entonces escucho de mi propia voz los pequeños o grandes logros que tengo, lo mucho que me amo y que si resulto incomprendida o criticada por otras personas escucho la voz de mi alma y vuelvo a mi propia esencia. • Me duele el estómago: Cuando esto sucede, me nutro de las cosas más saludables, busco darme simplemente lo mejor. • Me duelen las manos: Decido y suelto todo aquello que me da trabajo sostener, mis manos deben estar limpias y sin ataduras, recordando que nada nos llevaremos por ello no busco tener nada